Seguridad alimentaria

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La Listeria, ¿cómo prevenirla?

“Listeria: Crece la amenaza de la bacteria que sobrevive en tu nevera”, “La listeria, el mayor peligro de la cocina, mata a 70 personas al año” éstos son algunos de los titulares que hemos leído los últimos días escribiendo sobre la listeriosis.

Pero ¿Qué es? ¿Cómo se contagia? ¿Cómo se previene?

En Campos Serrano Biólogos llevamos unos años gestionando y evaluando la Seguridad Alimentaria de muchos negocios, garantizando la inocuidad de los alimentos y sus procesos de producción en la Región de Murcia y Almería. Sabemos lo importante que es  para la salud pública un buen plan de higiene y una buena gestión.

Por eso incidimos en la importancia de la prevención para evitar la infección por la bacteria Listeria.

Despejando dudas sobre la listeria

¿Qué es la Listeria?

La listeriosis es una infección provocada por el consumo de alimentos contaminados con la bacteria Listeria monocytogenes. Afecta sobre todo a personas con el sistema inmunológico debilitado, mayores, embarazadas y niños. La bacteria está presente en la tierra, el agua y el tracto intestinal de algunos animales.

La bacteria Listeria monocytogenes tiene especial capacidad para multiplicarse a temperaturas de refrigeración y, por tanto, es necesario prestar especial atención a estas condiciones. Además, en la mayoría de los casos, se transmite por alimentos que no es necesario calentar antes de consumir, un paso que sí lograría «matar» la bacteria. Y es que, a diferencia de otras transmitidas por alimentos, Listeria sí puede sobrevivir a temperaturas de refrigeración.

¿Por qué se contaminan los alimentos?

Las verduras se pueden contaminar por la tierra o a través del estiércol usado como fertilizante; los animales pueden ser portadores de la bacteria y, por tanto, contaminar carnes y productos lácteos; los alimentos procesados, como quesos frescos o carnes frías, pueden contaminarse después de su transformación.

¿Cómo se previene?

  • Una buena higienización, almacenamiento y cocción reducen el riesgo de infección. Otros consejos son:
  • No beber leche cruda (sin pasteurizar).
  • Lavarse las manos, utensilios, superficies y tablas de cortar después de manipular y preparar alimentos crudos.
  • Mantener las carnes crudas, pescados y marisco y vegetales separados de los alimentos cocinados y los listos para consumir.
  • Lavar frutas y verduras con abundante agua.
  • Consumir los alimentos perecederos tan pronto como sea posible.

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