Pulgas, cómo identificar y tratar las plagas.
¿Qué son las pulgas?
En la denominación “pulgas” se engloban diferentes especies de insectos parásitos de animales de sangre caliente.
Se trata de artrópodos de pequeño tamaño (alrededor de 5mm de longitud), con el cuerpo comprimido lateralmente y cubiertos de cerdas o pilosidades para facilitar su movimiento y fijación entre el pelo de los animales huéspedes. Son áptereos, es decir, carecen de alas, y sus patas están adaptadas al salto para facilitar su desplazamiento y alcance de los organismos infestados.
Biología y ciclo de vida
Las pulgas son ectoparásitos, esto es, parásitos que se desarrollan en la superficie de la especie infestada. Generalmente se hospedan e infestan mamíferos, aunque puntualmente pueden desarrollarse también sobre aves (principalmente aves de corral, palomas, gaviotas o aves de compañía como loros). Sus huevos no quedan adheridos de forma especial al huésped por lo que caen fácilmente al medio, que en el caso de viviendas pueden ser alfombras, parqués, camas de animales domésticos o simplemente el suelo de la vivienda, pero también en huecos como tubos respiraderos, techumbres, etc.
Alrededor de una semana después de la puesta se produce la eclosión de las larvas, que no precisan del hospedador sino que se alimentan de los restos orgánicos que encuentran a su alrededor, tales como pelos, plumas, restos de piel … y especialmente de las heces de las pulgas adultas, que les aportan sangre del huésped que finalmente parasitarán.
Tras la fase larvaria se produce la pupación, período en el que se produce la metamorfosis completa dentro de la pupa o capullo y durante la cual son insensibles a los tratamientos químicos de desinsectación.
Las pulgas pueden permanecer en este estado de latencia un cierto periodo de tiempo a la espera de la llegada de un huésped, al que detectan mediante diferentes mecanismos como las vibraciones, la presión, el calor o el nivel de CO2. Estos mecanismos de detección son de vital importancia para estos insectos, pues una vez emergen como individuos adultos se comportan como parásitos obligatorios, es decir precisan encontrar un animal de sangre caliente para alimentarse.
Molestias causadas como organismo plaga
Las pulgas se alimentan de sus huéspedes; para ello, perforan la epidermis y succionan su sangre. Esto provoca en el huésped picaduras que se identifican por presentar un único punto de inserción rodeado de una erupción rojiza que produce picor y en ocasiones reacciones alérgicas a la saliva de estos insectos.
Aparte de las lógicas molestias que pueden generar en humanos o animales domésticos, las pulgas son vectores de propagación de enfermedades. Es decir, son organismos portadores y transmisores de diferentes enfermedades y de otros parásitos que pueden afectar al ser humano. Entre las enfermedades, destacan la peste bubónica o el tifus, transmitido por las pulgas de las ratas; entre los parásitos transmitidos, podemos referir diferentes especies de cestodos o tenias propios de animales domésticos como perros y gatos que eventualmente pueden pasar al ser humano.
Control de la plaga
Para realizar un adecuado control frente a una plaga de pulgas en una vivienda o inmueble se deben aplicar dos estrategias complementarias.
- Por una parte, se ha de identificar la fuente generadora de la plaga.
Habitualmente se debe a la incorrecta desparasitación de animales domésticos y de compañía, como perros y gatos. En este caso la identificación del origen del problema es sencilla, pues es fácil observar que los animales se rascan y, aunque puede resultar difícil encontrar las picaduras en su piel, existen otros indicios como la presencia de heces de pulgas, que presentan un aspecto de pequeños puntos oscuros que encontraremos entre el pelaje del animal o en los tejidos que empleemos en su zona de descanso.
La aplicación de productos veterinarios específicos para la prevención de pulgas en animales de compañía es una medida sencilla, barata y de obligado cumplimiento preventivo.
Sin embargo hay que tener en cuenta que el origen de la plaga puede estar en animales silvestres próximos al ser humano y que aprovechan los inmuebles como refugio y lugar de reproducción, como es el caso de ratas, ratones, erizos, ardillas, gaviotas, etc. En este caso se deben aplicar medidas de eliminación específicas en función del organismo del que se trate, tales como desratización o eliminación de huecos y rendijas; estos trabajos deben llevarse a cabo por empresas especializadas en control de plagas y por profesionales cualificados.
- La segunda estrategia a aplicar pasa por la completa eliminación de todos los huevos y larvas de pulgas que los animales hayan esparcido en suelos, huecos, zócalos y tejidos. Los suelos deben ser barridos y fregados y los tejidos de camas y las tapicerías deben lavarse con agua caliente a más de 60º C. Para zonas de difícil acceso, la aspiración resulta es muy eficaz.
En todo caso, cuando se observen grandes infestaciones, es imprescindible la actuación de especialistas en control de plagas que realicen una identificación entomológica de la especie exacta de pulga; con eso se consigue localizar el foco inicial y determinar la aplicación de las medidas de fumigación, higienización, desinsectación y eliminación más adecuadas así como las medidas de prevención posteriores.
En Campos Serrano Biólogos somos expertos en desinsectación tanto a nivel doméstico como industrial. Nuestros profesionales, altamente cualificados y formados específicamente en este campo, implementan planes de control integral de plagas que eliminan la infestación y determinan sus posibles causas para evitar así futuras plagas.