Principales diferencias entre abejas y avispas

Confundir abejas y avispas, para el ojo inexperto, es sencillo. Ya que son insectos parecidos pero muy diferentes, sobre todo por su labor para el ecosistema. En este post veremos todas las características que las diferencian.

Diferencias físicas

Ambos insectos se parecen a simple vista: tienen los mismos colores, el tamaño es similar y un zumbido parecido; pero existen importantes diferencias entre ellas:

  • Tamaño

Las avispas tienen un tamaño mayor al de las abejas. Las abejas suelen medir desde 15 mm hasta 20 mm (las reinas). Por otro lado, las avispas pueden variar mucho más de tamaño, llegando a medir entre 10 mm y 35 mm según la especie.

  • Cuerpo

El abdomen de las avispas es de color castaño con marcas amarillas o naranjas, sus alas tienen un color rojizo y carecen de pelos.

Las avispas se diferencian de las abejas por su abdomen inferior puntiagudo y su estrecha cintura, llamada pecíolo, que separa el abdomen del tórax. Los colores del cuerpo de las avispas pueden ser desde el amarillo al que ya estamos acostumbrados, hasta el marrón, el azul metálico o el rojo vivo, dependiendo de la especie.

El cuerpo de la abeja está formado por tres partes: la cabeza, el tórax (segmentado en tres partes que contienen las patas y las alas) y el abdomen, con seis segmentos visibles que culmina en el aguijón. Tienen, 3 pares de patas, y son de color negro con rayas más o menos doradas y muy bien definidas.

En su cabeza, las abejas cuentan con 3 ojos simples en el centro de la cabeza llamados ocelos. A los lados de estos ocelos tienen 2 ojos compuestos por miles de ojos que se encargan de detectar el movimiento. Sus antenas cuentan con los sentidos del tacto, olfato, oído.

Diferencias de comportamiento 

Las avispas son animales más agresivos porque son depredadoras, es decir, tienen que alimentarse de insectos para sobrevivir (además, al atacar no mueren). Por otro lado, las abejas son mucho más sociables, ya que conviven en las colmenas, pero, además, tienen una misión muy importante para el ecosistema: la polinización. Por este motivo, son insectos protegidos.

Las abejas fabrican una deliciosa miel que todos hemos probado. Por otro lado, las avispas también fabrican miel, pero hay que llevar cuidado ya que no siempre es una miel comestible (dependerá de la flor de la que la avispa haya recogido el néctar).

Ahora que sabes distinguir entre abejas y avispas ya puedes actuar de la forma adecuada en cada caso:

  • Avispas: llamar a Campos Serrano Biólogos para que nos encarguemos de eliminar el avispero (es fundamental que se realice rápidamente antes de que se desarrolle plenamente para así evitar complicaciones mayores con un avispero de mayor tamaño).
  • Abejas: llamar al 112 para su gestión, ya que es una especie protegida.

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